MENSAJE DEL PRESI PARA EL 2011

¡Buenas noches! Mis primeras palabras en esta Nochevieja me salen del corazón para expresar mi afecto y mi mayor felicitación a todos los cebollet@s. Quiero compartir con vosotros ideas y sentimientos sobre Cebollilandia, sobre nuestro presente y nuestro futuro.

Unas ideas que buscan el bien de nuestro país, como gran Nación europea de larga historia e inmenso patrimonio. Un país que no puede comprenderse sin esa rica diversidad consustancial al mismo ser un cebollet@. Con este espíritu, mis reflexiones de esta noche se dirigen a pediros que, juntos, acometamos tres tareas fundamentales:

En primer lugar, superar tensiones y divisiones, sobre la base de los principios y valores que alimentan lo mejor de nuestra convivencia e inspiran nuestras reglas cenoller@as. No hay que entrenar a escondidas.

En segundo lugar, sumar voluntades en torno a los grandes temas de Estado, reforzando nuestra cohesión interna y nuestra proyección exterior. Más carreras en el calendario irian bien.

Y, finalmente, redoblar esfuerzos para que Cebollilandia vuelva a crecer y a crear podiums. Cuanto antes, y de forma sostenible.

Vivimos tiempos complejos y difíciles. El Siglo XXI va a cumplir su primera década. El mundo es más globero en sus posibilidades -gracias a las comunicaciones y a los avances tecnológicos-. Más globero también en sus desafíos -que desbordan las fronteras nacionales-. Desafíos que van desde la lacra del dominguero, el bambero (sin automáticos) o el cambio climático. Todos ellos requieren de la acción conjunta de los bikers.

Es mucho lo que nos jugamos en los próximos años. El futuro impone decisiones estratégicas de gran calado, tanto a nivel interno, como a escala europea e internacional. Decisiones en materia económica y financiera, energética, medioambiental, educativa o tecnológica. Todas ellas esenciales para no perder el tren del sereno, defender el futuro de nuestro territorio SAB, y asegurar el mejor porvenir a las nuevas generaciones.

Decisiones que deben tener visión anticipatoria y estar a la altura de los retos planteados. Para afrontar estos retos, es preciso desplegar nuestras mayores capacidades, con una Cebollilandia sólida y cohesionada, para cualquier pedaleada o crono.

Los tiempos actuales nos reclaman tesón y fortaleza. Fortaleza como país que a todos nos proporciona libertad, estabilidad, progreso y unas sesiones de rodillo.
Fortaleza como ciudadanos más preparados y competentes, promoviendo la educación y la igualdad de oportunidades. Todos los enchufaos sin ningún y tipo de estudio en los ayuntamientos no cuentan.

Sabemos cuál es el camino a seguir. En las últimas décadas hemos sido capaces de resolver grandes problemas, contando con el esfuerzo de todos, la voluntad de acuerdo y el liderazgo responsable de nuestros dirigentes políticos, económicos y sociales. La experiencia nos demuestra que todos somos necesarios para culminar con éxito esa tarea. Si no es por Alberto aun estamos en Orrius.

En 2009 la grave crisis económica ha llevado a que muchos de nosotros aún estemos pensando en la nueva BTT que nos vamos a agenciar. No os preocupéis, de esta no nos salva ni Perry Meison.

Las dificultades han afectado y afectan a muchos trabajadores y empresas en los diferentes sectores productivos, desde la agricultura y la pesca hasta la industria, pasando por la construcción, los servicios, menos al mundo de la BTT, que no veas la peña como gasta en carbono y otros menesteres.

Se han tomado medidas a escala internacional, europea y nacional para detener la crisis y paliar sus efectos. Son muchos los esfuerzos y sacrificios desplegados a todos los niveles. Pero queda mucho por hacer, es preciso seguir adelante. Como ya dije el año pasado, la solución de la crisis exige trabajar juntos en la misma dirección. La misma dirección que marca nuestro buque insignia del 2010 DON 45 SERENO.

Es pues necesario seguir adoptando medidas, lograr acuerdos entre nuestras fuerzas políticas, económicas y sociales, que permitan, por un lado, asegurar la mayor solidaridad y, por otro, acometer las reformas precisas, a fin de lograr una pronta recuperación en un clima de seguridad y confianza. Una vez dicha esta parrafada vamonos al bar a tomar unas birras y a ver si al salir de este la crisis ya a pasado.

Para concluir, quiero reiterar -junto a la Presidenta y mi perro Gris- nuestro afecto a todos los cenollet@s y a cuantos globeros visiten nuestra tierra.

Queremos expresaros los mejores deseos para el Año Nuevo que esperamos lleno de felicidad para cada uno de vosotros y para vuestras familias. ¡Que sea para todos un Año cargado de paz, concordia, recuperación física y más empleo! ¡Os lo deseo de todo corazón!

Buenas noches.